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Mononucleosis

¿Qué es la mononucleosis?

La mononucleosis es una infección vírica que causa dolor de garganta y fiebre. Es muy frecuente en los adolescentes y los adultos jóvenes. Desaparece por sí sola tras unas pocas semanas de reposo.

Causas de la mononucleosis

La mononucleosis infecciosa suele estar causada por una infección por el virus Epstein-Barr. La mayoría de los niños se exponen a este virus en algún momento de su desarrollo. Los bebés y los niños pequeños que se infectan con el virus Epstein-Barr suelen presentar síntomas leves o ningún síntoma en absoluto. Pero los adolescentes y los adultos jóvenes infectados suelen desarrollar los síntomas propios de la mononucleosis. 

Otros virus, como el citomegalovirus, a veces también pueden causar una enfermedad similar a la mononucleosis. 

¿Cuáles son los signos y los síntomas de la mononucleosis? 

Los signos de la mononucleosis no suelen aparecer hasta 1 o 2 meses después de que una persona se infecte con el virus Epstein-Barr. Sus síntomas más comunes a veces se confunden con los propios de la faringitis estreptocócica o con los de la gripe. Entre ellos, se incluyen los siguientes:

  • fiebre
  • dolor de garganta con amígdalas inflamadas que pueden presentar machas de color blanco 
  • ganglios linfáticos del cuello inflamados
  • estar muy cansado

Los afectados también puede presentar:

  • dolores de cabeza
  • dolores musculares
  • debilidad
  • dolor abdominal con un hígado o un bazo (órgano ubicado en la parte izquierda superior del vientre) más grandes de lo normal.  
  • erupciones cutáneas
  • pérdida del apetito

¿Es contagiosa la mononucleosis? 

La mononucleosis es contagiosa. Se contagia de una persona a otra a través del contacto directo con la saliva. También se conoce coloquialmente como “la enfermedad del beso” porque se puede trasmitir a través de los besos. También se contagia a través de la tos y de los estornudos, o cuando la gente comparte algo que contenga saliva infectada (como una pajita, un vaso, un utensilio para comer o un cepillo de dientes). 

La mononucleosis también se puede trasmitir a través del coito y de las transfusiones de sangre, aunque es algo mucho menos frecuente. 

La gente que ha contraído esta infección será portadora del virus durante toda la vida, incluso después de que desaparezcan los síntomas o aunque no llegue a presentar síntomas. El virus permanecerá “latente” o inactivo en su organismo. A veces el virus latente se “despierta” y encuentra la forma de llegar a la saliva de la persona portadora. Esto significa que las personas que han contraído la mononucleosis en el pasado la pueden contagiar de vez en cuando, incluso aunque no presenten ningún síntoma. 

¿Cómo se diagnostica la mononucleosis?

Para diagnosticar la mononucleosis, los médicos exploran al paciente a fin de saber si tiene las amígdalas inflamadas, así como un hígado o un bazo agrandado, signos frecuentes de esta infección. A veces, los médicos piden un análisis de sangre. 

¿Cómo se trata la mononucleosis? 

El mejor tratamiento de la mononucleosis es mucho reposo y beber abundantes líquidos, sobre todo al principio de la enfermedad, cuando los síntomas son más graves. No hay ningún medicamento específico que se dé para tratar la mononucleosis, pero el paracetamol o el ibuprofeno pueden ayudar a bajar la fiebre y a aliviar los dolores musculares. Los antibióticos no sirven para tratar la mononucleosis, porque solo son eficaces en las infecciones de origen bacteriano. Las personas con mononucleosis que toman antibióticos suelen acabar desarrollando erupciones en la piel. 

No dé nunca aspirina, o cualquier otro medicamento que contenga salicilatos, a un niño con una enfermedad de origen viral porque su uso se ha asociado al síndrome de Reye, que puede causar fallo hepático y hasta ser mortal. 

¿Cuánto dura la mononucleosis? 

Los síntomas de la mononucleosis suelen desaparecer en un plazo de 2 a 4 semanas. De todos modos, en algunos adolescentes, el cansancio y la debilidad pueden durar meses. 

¿Se puede prevenir la mononucleosis?

No hay ninguna vacuna que proteja contra el virus Epstein-Barr. Pero puede proteger a su hijo de la mononucleosis asegurándose de que evita el contacto directo con personas que tengan esta enfermedad.

Muchas personas con mononucleosis no presentan síntomas, pero la pueden contagiar a otras personas. Por eso, los niños deben lavarse las manos bien y a menudo, así como no compartir bebidas ni utensilios para comer con los demás, tampoco con la gente que parezca estar sana. 

¿Qué más debería saber?

La mononucleosis puede hacer que el bazo se hinche durante varias semanas o durante más tiempo. Un bazo agrandado puede llegar a reventar, lo que causa dolor abdominal y hemorragia interna, que se debe tratar en una cirugía de emergencia. Por eso, los médicos recomiendan que los niños con mononucleosis eviten los deportes de contacto por lo menos durante un mes después de que les remitan los síntomas de la enfermedad.  Si su hijo tiene la mononucleosis debe evitar jugar de forma activa o movida, levantar pesos y cualquier otra actividad agotadora hasta que su médico le dé el visto bueno. 

En la mayoría de los casos, los síntomas de la mononucleosis remiten en varias semanas con mucho reposo y toma de abundantes líquidos. Si los síntomas persisten o empeoran, o si hay algo que le preocupa, llame al médico de su hijo.