Tus huesos son muy fuertes – pero incluso las cosas fuertes pueden romperse, Al igual que un lápiz de madera, los huesos pueden doblarse bajo presión, pero cuando la presión es demasiado fuerte o repentina, los huesos pueden quebrarse. Tú puedes romperte un hueso cayéndote de una patineta o de las barras del pasamanos en el parque.