Exploración segura para preescolares
Listo para explorar
Los niños de 3 a 5 años de edad tienen toneladas de energía y les encanta caminar, correr, bailar y jugar. Esta también es una edad genial para explorar. Los niños de preescolar aprenden mucho cuando se les da la oportunidad de investigar su entorno (con la supervisión de un adulto, por descontado).
Para un preescolar hay mucho por explorar. Ahora que ya ha crecido, puede centrar su energía en dominar actividades más complejas, como disfrazarse, montar en triciclo o construir cosas usando la nieve como material.
Con paciencia y algo de imaginación, usted puede ayudar a su hijo a mantenerse seguro y feliz mientras explora.
Favorezca la exploración
He aquí algunas cosas a tener en cuenta:
Manténgase un poco al margen. Resístase a la tentación de darle a su hijo demasiadas instrucciones a la vez o de exigirle demasiada corrección. Trate de darle ánimos y de estimularlo para que explore por sí mismo. Si su hijo quiere usar su zapato como si fuera un sombrero o una taza de té, déje que lo haga. El lenguaje que usted use puede marcar la diferencia. Dígale: “¡Es un sombrero genial!” o “¿Cómo sabe ese té?”
Si su hijo está haciendo algo que no es seguro, corríjalo con tranquilidad o distráigalo. Por ejemplo, explíquele el uso real de un objecto (“Las ollas se usan para cocinar, no para golpear a tu hermano pequeño”), luego fomente la exploración con usos más aceptables, como utilizar una cuchara a modo de mazo y la olla a modo de tambor o usar la olla para simular cocinar una sopa.
Usted le puede sugerir a su hijo ideas para jugar, pero es posible que su hijo tenga otras ideas en mente, o que vaya a parar con algo que le resulte más intrigante. Permitir que los niños pasen algún tiempo sin que intervenga un adulto les puede ayudar a desarrollar la creatividad y aprender a dominar tareas por si solos.
Es bueno equivocarse. El ensayo y error es un magnífico maestro. Permita que su hijo “fracase” de algún modo (como no ser capaz de usar bien una cremallera) es algo bueno para los dos. Cuando su hijo empiece a hacer algo de una manera incorrecta y se frustre, dele ánimos. También le puede dar oportunidades para que lo siga intentando hasta que lo domine. Y seguro que dentro de poco su hijo será capaz de abrir y cerrar cremalleras como un campeón.
Ideas de actividades para preescolares
No hace falta que vayan a ningún lugar en especial para fomentar la exploración. Aquí encontrará algunas maneras de fomentarla:
¡Al agua patos!
A los niños de esta edad les encanta el agua y mojarse. Busque objetos seguros que tengan por casa o en el patio o jardín que se puedan lavar y examinar. ¿Qué le ocurre a una hoja cuando se moja? ¿Y a una piedra? Coloque esos objetos en un lugar que se pueda mojar (en el exterior, dentro de la bañera, sobre una mesa con un mantel que se pueda mojar y tapando también el suelo), y deje que su hijo los moje y remoje, los lave, los aclare y se salpique. Como siempre, asegúrese de supervisar a su hijo de cerca mientras juega con el agua.
La importancia del tacto
Usar tazones llenos de cosas como granos de maíz, harina, judías secas, arroz, espirales de pasta o arena puede darle a su hijo cosas interesantes para palpar, agarrar, verter o volcar. Asegúrese de supervisarlo para que no intente comerse lo que contienen los tazones.
Representar
A los preescolares también les gusta jugar a juegos de representación de roles. Haga a su hijo propuestas seguras sobre tareas cotidianas, como hacer la compra, preparar la cena o ir al trabajo. Y dele una caja llena de viejas prendas de ropa, gorros, sombreros y otros accesorios, para que se pueda disfrazar con lo que quiera mientras juegue a representar papeles.
Hacer obras de arte
Puede acabar siendo una obra de arte abstracto, pero está bien. Prepare a su hijo una “caja para crear” con materiales para dibujar, adhesivos para pegar, arcilla, pajitas y bloques. Deje que trabaje sobre periódicos si están en un interior, o bien en el exterior si hace calor.
Observar la naturaleza
Usando unos buenos binoculares que sean seguros para los niños o una buena lupa, los niños pueden explorar la naturaleza. Esto puede funcionar tanto en el patio trasero de su casa como en plena naturaleza.
Cuando sea seguro, deje que sea su hijo quien dirija la exploración. Manténgase uno o dos pasos detrás de él y deje que su hijo haga sus propios descubrimientos. Es divertido cuando mamá o papá señala una mariquita que está avanzando sobre una hoja. Pero, si eres un niño de preescolar, todavía es más divertido que seas tú quien diga: “¡Eh, mamá. Mira esto!”.