Hoja informativa sobre la escoliosis (para las escuelas)
Qué deben saber los maestros
La escoliosis es una afección en la que la columna vertebral se curva lateralmente. Una persona con escoliosis puede tener la espalda curvada de un lado a otro en forma de “S” o de “C”. Algunas afecciones, como la parálisis cerebral o la distrofia muscular, pueden provocar escoliosis, pero en la mayoría de los casos la causa no está clara.
La escoliosis se puede desarrollar con el paso del tiempo. No se suele diagnosticar hasta que el niño tiene entre 10 y 14 años de edad, que es el momento en el que la mayoría de los niños pegan el estirón.
La mayoría de los alumnos con escoliosis no necesitan ningún tipo de intervención porque casi todas las curvaturas leves no causan problemas. Pero si la curvatura empeora, esta afección puede:
- ser más visible
- causar molestias o dolor
- afectar negativamente a los pulmones y el corazón
- provocar lesiones en las articulaciones de la columna vertebral
En las escoliosis asociadas a curvaturas importantes, los médicos suelen recomendar que los niños lleven corsés ortopédicos. La mayoría de los corsés ortopédicos se pueden llevar puestos debajo de la ropa. En los casos graves, la cirugía (operar al paciente) ayuda a corregir la curvatura de la columna vertebral. Con un tratamiento eficaz, casi todos los alumnos con escoliosis pueden llevar una vida activa y normal.
Es posible que los alumnos con escoliosis:
- se avergüencen de tener que llevar puesto un corsé ortopédico
- pierdan mucho tiempo de clase si se tienen que operar
- necesiten más tiempo para completar las tareas escolares y hacer los exámenes
- se beneficien de un plan de educación 504 que establece adaptaciones para sentarse, más tiempo para llegar a las aulas y para cambiarse de aula, y pases para poder usar el ascensor
- necesiten visitar la enfermería escolar para tomar medicamentos para el dolor o para que les corrijan el ajuste del corsé
- no puedan participar de las clases educación física ni hacer deporte
Qué pueden hacer los maestros
La mayoría de los niños con escoliosis no tienen limitaciones físicas. La escoliosis no afecta a la capacidad de un niño para aprender, pero el hecho de llevar puesto un corsé ortopédico o de tener alguna limitación física puede hacer que el alumno se avergüence o se sienta acomplejado. Anime a sus alumnos con escoliosis a participar en todas las actividades de la clase que estén capacitados para hacer y sea comprensivo cuando sientan molestias o cansancio.
Según el grado de escoliosis, es posible que sus alumnos deban visitar a varios especialistas médicos. El hecho de permitirles tener más tiempo para terminar las tareas escolares y de enviarles tareas a casa mientras se recuperan de las operaciones a las que se tengan que someter puede ayudarlos a mantenerse al día sin sentirse agobiados.